lunes, 3 de febrero de 2014


DIFERENCIACIÓN Y FIDELIZACIÓN


El texto visto en la clase del viernes pone de manifiesto cómo ha evolucionado el mercado laboral y hacia dónde se dirige. Creo que lo que podemos ver es una consecuencia del mercado laboral de personas formadas. Desde una posición inicial con un mercado que demanda personas cualificadas en el que éstas son un bien escaso a una situación en la que hay un excedente de personas cualificadas y que por tanto necesitan de una diferenciación para poder encontrar su posición en el mercado

El caso de Juan es el de aquella persona que ha dedicado sus esfuerzos a obtener una formación que le permite diferenciarse de aquellos que no lo están y que por ello espera un puesto de trabajo bien remunerado. El hecho es que actualmente una formación universitaria está al alcance de todos, por lo que ya no supone una diferenciación y por tanto pierde el valor que antes tenía. Hay muchas personas que hoy en día son capaces de hacer lo mismo que Juan y por tanto ya no es valorado como él esperaba.

Por otra parte tenemos el caso de Paquita. Ella ha encontrado una manera de vivir que consiste en realizar diferentes actividades que le han ido generando varias fuentes de pequeños ingresos. En el caso de Paquita se ha generado un valor extra porque ha diferenciado su oferta. Ofrece diferentes productos que le han dado buenos resultados y que los explota.

El caso de Agustín se diferencia respecto al de Paquita en que no se trata de encontrar unas ideas que le den resultado sino que además está inmerso en un proceso constante de creación y de comunicación con el resto de la comunidad con lo que se consigue un nombre o una marca. Está consiguiendo diferenciar sus productos ya que él mismo es la marca y además la comunicación permanente con el resto de la comunidad le permite mantener una fidelización con sus clientes.

Los ejemplos expuestos me recuerdan en cierta manera al proceso seguido por la industria y las empresas, Si bien en un principio el problema era producir lo suficiente y por tanto todo lo producido se vendía, una vez mejorados los sistemas de producción y tras la automatización de las empresas, el problema pasa a ser cómo vender todo lo que las empresas pueden producir, dando paso a disciplinas como el marketing que tratan de captar la atención de los clientes mediante diferentes técnicas cómo pueden ser la disminución de costes, la creación de marcas que diferencien los productos o técnicas de comunicación que pretenden crear una fidelización de los clientes.